Algunas personas piensan que el éxito va acompañado
de un poco de suerte en las oportunidades y
actitud, dos ingredientes totalmente opuestos para este fin. Quizás,
desde la perspectiva de estas personas estarían en lo correcto para justificar
las oportunidades rechazadas, mas desde
mis conocimientos y experiencias sobre la materia, no lo veo así.
Primero
debemos ubicarnos qué entendemos por Éxito. Ciertamente, pueden existir
diversas definiciones sobre el mismo, pero considero que lo importante es que
cada uno de nosotros dejemos en claro que entendemos por el éxito. Les voy a
dar una pista de Opi Juan autor del libro “Las
claves del comportamiento Humano” quien cita la obra “En
busca del éxito”:
“Reír con frecuencia y mucho.
Merecer el respeto de personas inteligentes y el
afecto de los niños.
Ganar el reconocimiento de críticos honestos y
soportar la traición de falsos amigos.
Gozar de la belleza.
Descubrir lo positivo de los demás.
Hacer un poco mejor el mundo, dejando tras de ti a
un hijo bueno o un jardín cultivado, o bien, porque ayudaste a un pobre.
Saber que no viviste en vano y que, gracias a ti,
una persona pudo respirar con más tranquilidad.
Segundo
lugar, una vez que tengamos su definición, es ubicar cuáles son las áreas de
desarrollo del Éxito. Por consiguiente el éxito es integrador y, solo así,
podremos decir que el mismo va acompañado de la mano con la Felicidad. El éxito
no puede ser visto solo desde la perspectiva económica o desarrollo
profesional, sino de la vida familiar, física mental, profesional, social y
espiritual. Lo he publicado en otros de mis artículos, conozco muchas personas
que dicen ser exitosas económica o profesionalmente, pero todo un desastre en
la vida familiar e inclusive espiritual.
Unos
días atrás me enviaron por facebook una nota sobre un matrimonio mexicanos que
iban a cumplir 81 años de casados, creo que el esposo tenía 95 años de edad y
ella 93, su aspecto es de personas muy, pero muy humilde, tan solo con una gran
diferencia de muchos, su rostros reflejaban un gran amor. Su secreto de
mantenerse vivos como familia es: orar siempre juntos. Que hermoso testimonio
de estos esposos y que ejemplo para la sociedad en general. Para ellos el éxito
estaba proyectado en la familia ¿cuestión de suerte? No. Sino de amor,
paciencia, comprensión, sacrificios, tolerancia, comprensión, fe, unidad y aceptación.
¿Cuántos momentos difíciles habrán pasado estos esposos? Lo vencieron y siguen
venciendo; hablaban de tener diez generaciones; desde aquí les envío mi
bendición.
En
tercer lugar, es dejar claro que el Éxito empieza desde tu mente, cambiando tus
pensamientos para estar reflejado en tu actitud. No es tarea fácil, pero
tampoco imposible, solo es dejar en claro tu proyecto de vida, reflejando tus
sueños en metas y éstas en objetivos.
Te invito a re-direccionar el pensar en negativo a
positivo, no convertirse en esclavo de los prejuicios; tener confianza en ti,
cada uno de nosotros tenemos virtudes y cualidades diferentes; nunca te menos
desprecie. Te fe en lo que vayas hacer, siempre que sea algo positivo para el bien tuyo y de tus seres queridos,
piensa que es lo mejor que vas a conquistar. Conviértete en un apasionado de la
vida, de tu trabajo, tiempo recreacional, etc., disfruta cada momento y haz
todo con Amor. Mantén siempre el apetito por conocer, edúcate para triunfar en
la vida; la educación transforma en mente y actitud.
Para
finalizar, tan solo queda en ti en creer o no que el éxito es cuestión de
suerte; si es así, entonces algunos
serán los afortunados y otros no. En cuál categoría te ubicas. De lo contrario
si piensas que el éxito es cuestión de mente y actitud, bienvenido seas y vamos
tras su conquista sin renunciar a él, porque todos hemos nacido para triunfar.